Por Luis Martínez Alcántara
A una semana de que Ovidio Guzmán López, alias El Ratón, formalice su culpabilidad en la Corte del Distrito Norte de Illinois, la Fiscalía de Nueva York decidió retirar los cargos por narcotráfico que pesaban sobre él en ese estado.
En un documento firmado el 30 de junio, el hijo de El Chapo aceptó renunciar a su derecho a juicio en Nueva York, con el objetivo de concentrar su caso en Chicago, donde se encuentra detenido desde septiembre de 2023.
La decisión de la Fiscalía responde al inminente acuerdo de culpabilidad que Guzmán López alcanzó tras meses de negociaciones con el gobierno de Estados Unidos. En la corte de Chicago enfrenta cinco cargos: tráfico de drogas, lavado de dinero, crimen organizado y uso de armas. El 9 de julio se espera que declare su responsabilidad penal, lo que podría abrir la puerta a una sentencia reducida y beneficios carcelarios a cambio de cooperación.
El proceso judicial de Ovidio en EU comenzó con su extradición desde México el 15 de septiembre de 2023, tras ser capturado en un operativo militar en Jesús María, Sinaloa. En su primera audiencia tres días después, se declaró no culpable. Sin embargo, para mayo de 2025, la jueza Sharon Johnson fue notificada de que ya existía un acuerdo de culpabilidad, por lo que se suspendió la audiencia fijada para el 12 de ese mes.
El caso de El Ratón se conecta directamente con el de su hermano Joaquín Guzmán, El Güero, quien también está acusado de los mismos cargos. Se prevé que el 15 de julio retome su proceso legal en Chicago. Al igual que Ovidio, ha entablado pláticas para declararse culpable y se le atribuye haber colaborado con las autoridades para entregar a Ismael El Mayo Zambada.
Esta nueva etapa judicial cierra un capítulo iniciado en 2019 con el fallido Culiacanazo, cuando Ovidio fue liberado tras su captura para evitar una masacre. Su detención definitiva en 2023 y posterior extradición marcaron un giro en la estrategia del gobierno mexicano. Ahora, todo indica que El Ratón está dispuesto a negociar, no solo su destino, sino también el futuro del Cártel de Sinaloa.
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