Por Luis Martínez Alcántara
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, envió al Congreso de la Unión dos iniciativas de reforma constitucional con el objetivo de fortalecer la democracia y combatir prácticas que afectan la integridad política del país.
La primera iniciativa busca prohibir la reelección en cualquier cargo de elección popular, retomando el histórico lema “Sufragio efectivo, no reelección”. Esta medida pretende asegurar la renovación constante de los liderazgos y evitar la perpetuación en el poder.
La segunda propuesta legislativa está dirigida a eliminar el nepotismo en la política mexicana. Específicamente, se plantea prohibir que cualquier familiar pueda suceder de manera inmediata a otro en un puesto de elección popular. Con esta reforma, se busca impedir que las posiciones de poder se mantengan dentro de un círculo familiar, promoviendo así una mayor equidad y transparencia en los procesos electorales.
Estas iniciativas reflejan el compromiso de la administración de Sheinbaum con los principios de la Revolución Mexicana y la Constitución de 1917, enfatizando la importancia de una democracia auténtica y la lucha contra cualquier forma de corrupción.
En el marco de la conmemoración del 108 aniversario de la Constitución de 1917, Sheinbaum también envió un mensaje contundente al gobierno de Estados Unidos y al presidente Donald Trump. Ante las recientes tensiones derivadas de la imposición de aranceles y otras medidas, la mandataria afirmó que México es una nación libre, soberana e independiente, y que no permitirá ninguna forma de intervención o subordinación.
La presidenta enfatizó que, aunque México está dispuesto a la cooperación y colaboración internacional, esto nunca se hará en detrimento de la dignidad y soberanía nacional. “Cooperación sí, subordinación no. Colaboración sí, sometimiento no”, declaró Sheinbaum, dejando claro que cualquier intento de vulnerar la autonomía del país será enfrentado con firmeza y unidad por parte del pueblo mexicano.
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